Iran, 15 días después...

Han pasado quince días desde las elecciones en Irán. Quince días que han estremecido al mundo por las enérgicas protestas de los iraníes que se han lanzado a las calles de Teheran a reclamarle a las autoridades gubernamentales por lo que parece ser un gran fraude electoral. La mayoría no cree en los resultados que le dan la victoria a Mahmoud Admadinejad como presidente re electo.

Las más de 600 denuncias por las irregularidades en las elecciones, no han sido tomadas seriamente por el Consejo de Guardianes, encargado de velar por el buen funcionamiento de las elecciones a través de la Comisión Electoral. Consejo que a lo largo de estos días ha emitido declaraciones contradictorias. Primero algunos guardianes reconocieron que en 50 ciudades votaron más de los que realmente debían hacerlo. Reconocieron que por ese concepto mas de 3 millones de boletas son falsas. Luego dijeron a los medios que este proceso electoral había sido el más limpio desde la revolución de 1979. Lo cual pone en duda la validez de las anteriores elecciones, pero ese no es el caso de hoy.

Ya hemos visto que en cualquier país del mundo cuando hay elecciones, hay posibilidades de fraudes. Lo que normalmente hacen las comisiones electorales en países realmente democráticos como Estados Unidos, por ejemplo, es escuchar a los votantes y realizar conteos de boletas las veces que sean necesarias, de manera que nadie tiene que lanzarse a las calles a protestar para ser escuchado. Sin embargo en Irán los votantes no fueron escuchados. El mundo ha sido testigo de la represión brutal contra los manifestantes que reclamaban una explicación de a dónde fueron a parar sus votos. El pueblo esperaba la victoria de Mir Hossein Mousaví y al parecer le robaron los votos.

En estos quince días han apresado a cientos de manifestantes, algunos están desaparecidos. En las redadas han caido periodistas, catedráticos, estudiantes universitarios y pueblo en general. Han muerto en los enfrentamientos mas de 20 personas, entre ellas la joven Neda Agha Saltan.

Hay cosas que son muy dificiles de entender. Se supone que el Lider Supremo Ayatolá Alí Jamenei, vele por los intereses del pueblo iraní. Pero los hechos demuestran que ese Supremo Lider, supuesto representante de Alá en Irán, es un aliado defensor del sector ultraconservador extremista que apoya a Ahmadinejad y su politica contra Israel y contra Occidente.

La República Islámica de Irán, con un régimen teocrático populista, conservador y un tanto socialista por su economía bastante centralizada, se ha caracterizado desde su fundación en 1979, por su enemistad con Estados Unidos, Israel y con los paises democráticos de Occidente. Los cuatro años de gobierno de Ahmadinejad han aumentado las tensiones a nivel internacional porque ha establecido fuertes alianzas con los extremistas musulmanes y con los gobiernos izquierditas y socialistas, enemigos de Estados Unidos, y de Occidente en general. Ahmadinejad ha manifestado publicamente sus intenciones de eliminar a Israel de la faz de la tierra. Ha dedicado grandes recursos a la fabricación de armas nucleares lo cual representa un peligro para toda la humanidad.

Internamente su gobierno se ha caracterizado por una gran centralización de la economía, y a pesar de que Irán es el quinto exportador de petroleo en el mundo y los precios del crudo durante su primer periodo de mandato han estado por encima de los 100 dolares el barril, la economía iraní no marcha bien, de ahí que los sectores de la clase media y de los sectores mas desarrollados apoyen a Mousaví, quien siendo parte del sistema, se ha mostrado más bien como un conservador reformista que ha prometido libertades economicas y sociales,sobre todo para las mujeres y los jóvenes, así como desarrollar una politica conciliadora con occidente.

Los iranís quieren cambios en la dirección y en la politica del país. No solo la economía anda mal. Después de China, Irán es el país con más ejecuciones (fusilamientos) en el mundo. El año pasado 346 personas fueron ejecutadas en Irán. El presidente, fiel a la ideología del Lider Supremo, no admite el homosexualismo. Ser homosexual en Irán conlleva a la pena de muerte, amen de otras medidas extremistas propias de los países musulmanes machistas.

Cuando Obama comenzó su campaña electoral siempre se pronunció por una politica de diálogo con todos los países que como Iran, Cuba, Siria, Corea del Norte, han sido acérrimos enemigos de la democracia occidental y de Estados Unidos. Obama, desde la Casa Blanca, ha mantenido su palabra de dialoguero con las tiranías, sin embargo, bastó que hiciera una simple critica al gobierno iraní por el uso excesivo de las fuerzas contra el pueblo, para que lo culpen de lo que está sucediendo en Irán.

Paradojas de la politica de los gobiernos extremistas. Ayer el ayatolá Naser Makarem Shirazí pidió la pena de muerte para los cabecillas de las protestas declarando que éstas son en contra del mandato divino de Alá. Calificó a los manifestantes de mohareb (pecado de combatir contra Alá) lo cual es penado con la pena capital. A su vez los iranís por las noches, desde los techos de los edificios y de las casas evocan a su Dios con el lamento de "Alá es grande!, Alá es Justo!. Evocación que caracterizó los años de lucha por la revolución iraní, y que representa un reclamo de justicia.

Una vez más, un gobierno totalitaista y extremista culpa a Estados Unidos de injerencia en los asuntos internos del país. Espero que Obama abra los ojos y las entendederas y acabe de comprender que el dialogo no es posible con semejantes monstruos.

Como también espero que la ONU intervenga y ponga fin a esos horrores que hemos visto y que son testimonios vivos de la violación de los derechos humanos en un país que se autoproclama religioso y que firmó la Carta Magna de la ONU.
Esperanza E Serrano