SOÑANDO CON MI CUBA
Oh mi Cuba…hace tiempo ya que no te escribo
Mi pecho me lo pide, pero mi mano no me déja
pues como decirte, que soy libre y a la vez cautivo
Viviendo encerrado, detrás, de imaginarias rejas.
Para que contarte de tristes candilejas
Que a mi vida tan sentimental enferman
Mejor… no las despierto para ver si se alejan
Y que al arrullo del recuerdo duerman.
Siento aquí en mi pecho el dolor todavía
La yaga indeleble del pesado yugo
La mordida cruel de los áciagos dias
Soportando la aplastante bota del verdugo.
Por eso es que hace tiempo ya que no te escribo
Pero jamás he de olvidar tus rios y tus valles…
Mi Hermosa bandera que recordando vivo
Tus pueblos oprimidos, tus bellas avenidas y tus calles.
Allí vertí, sobre el polvo de tu sagrado suelo
Lágrimas que fueron, brotadas de mi alma…
Aquellas bellas noches de tu azulado cielo
Y los verdes penachos de tus frondosas palmas.
Cuanto extraño tus montes y praderas
El verdor de tus bosques, tus lagos y tus ríos,
Y me embriaga el recuerdo de las cordilleras
La hermosa provincia de Pinar del Rio.
Y así como un velero que perdió la proa
Como un ave perdida entre los maniguales
Mi mente me lleva al Salto de Soroa
Y ante el majestuoso Valle de Viñales.
Golpéa mi sueños un tañir de campanas
Que en medio de las noches parece que redoblan
Las horas se fugan…despunta la mañana
Y otra vez , los rayos del sol mi jardín adornan.
Las horas vuelan como aves asustadas
Y mis ojos vislumbran un Nuevo mañana
Cuando mi mente se torna ilusionada
Añorando la entonces majestuosa Habana.
Hoy mi recuerdo se torna enajenado
Y ante mis ojos veo como alucinación,
La sin igual belleza del Paseo del Prado
Y las hermosas olas en el malecón.
Y sigo divariando por el angosto estero
Donde mi mano no llega, pero mi mente alcanza
Hasta las azules aguas del bello Varadero
En la Atenas de Cuba…la bella Matanzas.
Y así galopa mi jaca enloquecida
Atravesando valles, caminos y praderas
Hasta llegar a un lugar que nunca se olvida
A Cárdenas …CIUDAD BANDERA
Mi mente cabalga a toda carrera
Pero… sin mover mi cuerpo de esta silla
Por aire, por mar, o por carretera
Hasta llegar al Salto del Hanabanilla.
Y con mis ojos puestos en la mirilla
La vida al parecer parece que no pasa
Pero al llegar a la provincia de Las Villas
Tal me parece que llegué a mi casa.
En este recorrido por pueblos y bateyes
Donde Cuba ultrajada en el dolor se funde
Por hombres que han creado tan absurdas leyes
Y como resultado, la patria, en los mares se hunde.
Y vuela mi verso como si fuera un dardo
Lanzado por el arco del cacique Hatuey
y le canta al gigante, valiente y gallardo
insigne patriota del bello Camaguey.
Y sigo en los apuntes que tengo en mi diario
Y en mi carrera loca a traves de los montes
Ellas me conducen al siempre legendario
Camaguey, la Hermosa tierra de Ignacio Agramonte.
Por eso no te he escrito mi Cuba querida
Pues solo tengo tristezas de que hablarte
Son muchas las páginas del libro de mi vida
Y todas están llenas de historias que contarte.
Te contaré algún día de estas tristes memorias
que serán todas juntas historias vivientes
cuando alcance mi voz a contarte la Gloria
que guarda en su seno el indómito Oriente.
La Sierra Maestra, El Cauto…Bayamo
El Pico Turquino. Verlos libres yo ansío
Y a toda Cuba verla libre soñamos
Igual que la soñó el mártir de Dos Rios.
Félix Pagés
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