Requien por ti
En los muros del silencio
quise escribir tu nombre,
quise escribirlo en el mar,
quise escribirlo en la arena,
quise grabarlo en las nubes,
quise regalarlo al viento...
En noche de aburrimiento,
tu nombre, animal herido,
se ha clavado, cruel espina,
en la neblina del otoño,
en el frío del invierno,
y en las lluvias del verano.
Pero el viento no lo quiere,
ni el mar lo recibe,
ni el mar lo recibe,
ni la arena lo resiste,
ni las nubes lo soportan,
ni con el viento se marcha...
Por eso, juro ante el Dios mío,
que mañana de madrugada,
lo borraré de mi vista,
lo enterraré tan adentro,
que hasta la memoria mía
se librará de sus garras.
Esperanza E Serrano
No hay comentarios:
Publicar un comentario