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miércoles, 12 de mayo de 2010

Escrito al azar...

El niño caprichoso que vive en ti ,
se divierte jugando al escondido
con su lógica de animal herido.

Te equivocaste.
No soy esa mitad de naranja
que buscas por doquier.
Lo siento seriamente.
Tienes la brújula,
es tuyo tu destino.

Cultivaré la rosa blanca,
para el amigo sincero...
cuidaré que las espinas
se claven bien afuera.

Ayer me miré al espejo
y supe que es mío el universo.
Te ofrecí mi mano,
te brindé mi regazo,
acaricié tus penas.
y..¿por qué no?
Te di amor ...
Te acompañé
en tus noches de insomnios.

No fue suficiente,
hoy, se quebró la copa,
se derramó mi vino,
Ya no hay orfebre
que arregle ese descuido. ..

Esperanza E Serrano

El hombre, el poeta, el escritor, el patriota, el guía...(1)



En memoria de nuestro José Martí publicaré en este blog algunos de sus escritos. Empezaré por aquellos que nos revelan interioridades del alma del hombre, del poeta, del escritor y del patriota que no dudó en dedicar la mayor parte de su tiempo a unir a los cubanos y a recaudar fondos para la lucha insurreccional: la guerra necesaria que le daría la libertad definitiva a Cuba de la corona española.

Para entender el ideario político de José Martí y su dimensión humanista, hay que conocer la época, el entorno y las circunstancias socio económicas, familiares y personales, a las que se enfrentaba cada día este gran hombre que vivió la mayor parte de su vida desterrado, lejos de su familia, trabajando incansablemente para mantener a los suyos desde el destierro, y a la vez dedicándole gran parte de su tiempo a la causa de la libertad de Cuba.

Hoy publicaré una de sus cartas a su hermana Amelia.


[Nueva York, 1880]

Tengo delante de mí, mi hermosa Amelia, como una joya rara, y de luz blanda y pura tu cariñosa carta. Ahí está tu alma serena, sin mancha, sin locas impaciencias. Ahí está tu espíritu tierno, que rebosa de tí como la esencia de las primeras flores de Mayo. Por eso quiero yo que te guardes de vientos violentos y traidores, y te escondas en tí a verlos pasar: que como las aves de rapiña por los aires, andan los vientos por la tierra en busca de la esencia de las flores. Toda la felicidad de la vida, Amelia, está en no confundir el ansia de amor que se siente a tus años con ese amor soberano, hondo y dominador que no florece en el alma sino después del largo examen, detenidísimo conocimiento, y fiel y prolongada compañía de la criatura en quien el amor ha de ponerse. Hay en nuestra tierra una desastrosa costumbre de confundir la simpatía amorosa con el cariño decisivo e incambiable que lleva a un matrimonio que no se rompe, ni en las tierras donde esto se puede, sino rompiendo el corazón de los amantes desunidos. Y en vez de ponerse el hombre y la mujer que se sienten acercados por una simpatía agradable, nacida a veces de la prisa que tiene el alma en flor por darse al viento, y no de que otro nos inspire amor, sino del deseo que tenemos nosotros de sentirlo; -en vez de ponerse doncel y doncella como a prueba, confesándose su mutua simpatía y distinguiéndola del amor que ha de ser cosa distinta, y viene luego, y a veces no nace, ni tiene ocasión de nacer, sino después del matrimonio, se obligan las dos criaturas desconocidas a un afecto que no puede haber brotado sino de conocerse íntimamente. -Empiezan las relaciones de amor en nuestra tierra por donde debieran terminar. -Una mujer de alma severa e inteligencia justa debe distinguir entre el placer íntimo y vivo, que semeja el amor sin serlo, sentido al ver a un hombre que es en apariencia digno de ser estimado, -y ese otro amor definitivo y grandioso, que, como es el apegamiento inefable de un espíritu a otro, no puede nacer sino de la seguridad de que el espíritu al que el nuestro se une tiene derecho, por su fidelidad, por su hermosura, por su delicadeza, a esta consagración tierna y valerosa que ha de durar toda la vida. -Ve que yo soy un excelente médico de almas, y te juro, por la cabecita de mí hijo, que eso que te digo es un código de ventura, y que quien olvide mí código no será venturoso. He visto mucho en lo hondo de los demás; y mucho en lo hondo de mí mismo. Aprovecha mis lecciones. No creas, mí hermosa Amelia, en que los cariños que se pintan en las novelas vulgares, y apenas hay novela que no lo sea, por escritores que escriben novelas porque no son capaces de escribir cosas más altas -copian realmente la vida, ni son ley de ella. Una mujer joven que ve escrito que el amor de todas las heroínas de sus libros, o el de sus amigas que los han leído como ella empieza a modo de relámpago, con un poder devastador y eléctrico -supone, cuando siente la primera dulce simpatía amorosa, que le tocó su vez en el juego humano, y que su afecto ha de tener las mismas formas, rapidez e intensidad de esos afectillos de librejos, escritos -créemelo Amelia- por gentes incapaces de poner remedio a las tremendas amarguras que origina su modo convencional e irreflexivo de describir pasiones que no existen, o existen de una manera diferente de aquella con que las describen. ¿Tú ves un árbol? ¿Tú ves cuanto tarda en colgar la naranja dorada, o la granada roja, de la rama gruesa? Pues, ahondando en la vida, se ve que todo sigue el mismo proceso. El amor, como el árbol, ha de pasar de semilla, a arbolillo, a flor, y a fruto. -Cuéntame Amelia mía, cuanto pase en tu alma. Y dime de todos los lobos que pasen a tu puerta; y de todos los vientos que anden en busca de perfume. Y ayúdate de mí para ser venturosa, que yo no puedo ser feliz, pero sé la manera de hacer feliz a los otros.

No creas que aquí acabo mi carta. Es que hacía tiempo que quería decirte eso, y he empezado por decírtelo -De mí, te hablaré otro jueves. En éste sólo he de decirte que ando como piloto de mí mismo, haciendo frente a todos los vientos de la vida, y sacando a flote un noble y hermoso barco, tan trabajado ya de viajar, que va haciendo agua. -A papá que te explique esto que él es un valeroso marino. Tú no sabes, Amelia mía, toda la veneración y respeto tiernísimo que merece nuestro padre. Allí donde lo ves, lleno de vejeces y caprichos, es un hombre de una virtud extraordinaria. Ahora que vivo, ahora sé todo el valor de su energía y todos los raros y excelsos méritos de su naturaleza pura y franca. Piensa en lo que te digo. No se paren en detalles, hechos para ojos pequeños. Ese anciano es una magnífica figura. Endúlcenle la vida. Sonrían de sus vejeces. El nunca ha sido viejo para amar.

Ahora, adiós de veras.

Escríbeme sin tasa y sin estudio, que yo no soy tu censor, ni tu examinador, sino tu hermano. Un pliego de letra desordenada y renglones mal hechos, donde yo sienta palpitar tu corazón y te oiga hablar sin reparos ni miedos -me parecerá más bella que una carta esmerada, escrita con el temor de parecerme mal. -Ve: el cariño es la más correcta y elocuente de todas las gramáticas. Dí ¡ternura! y ya eres una mujer elocuentísima.

Nadie te ha dado nunca mejor abrazo que éste que te mando.

¡Que no tarde el tuyo!

Tu hermano

J. Martí

lunes, 10 de mayo de 2010

La mujer y la casa




LA MUJER Y LA CASA

Hervías la leche
y seguías las aromosas costumbres del café.
Recorrías la casa
con una medida sin desperdicios.
Cada minucia un sacramento,
como una ofrenda al peso de la noche.
Todas tus horas están justificadas
al pasar del comedor a la sala,
donde están los retratos
que gustan de tus comentarios.
Fijas la ley de todos los días
y el ave dominical se entreabre
con los colores del fuego
y las espumas del puchero.
Cuando se rompe un vaso,
es tu risa la que tintinea.
El centro de la casa
vuela como el punto en la línea.
En tus pesadillas
llueve interminablemente
sobre la colección de matas
enanas y el flamboyán subterráneo.
Si te atolondraras,
el firmamento roto
en lanzas de mármol,
se echaría sobre nosotros.


José Lezama Lima

Nació el 19 de diciembre de 1910 en el Campamento de Columbia, en las proximidades de La Habana, donde su padre era coronel. Ya en la capital, participa en los alzamientos estudiantiles contra la dictadura de Machado y se matricula en Derecho.

Desde 1929 hasta su muerte, vivirá primero con su anciana madre y, más tarde, con su esposa en una casa de la parte vieja de la ciudad, tolerado a duras penas por el régimen castrista.
Poeta, ensayista y novelista, patriarca invisible de las letras cubanas, desde 1944 hasta 1957. Fundó la revista Verbum y estuvo al frente de Orígenes, la más importante de las revistas cubanas de literatura.
Su primer libro de poemas fue Muerte de Narciso (1937)
Enemigo rumor (1941), Aventuras sigilosas (1945), Dador (1960) y Fragmentos a su imán, publicado póstumamente en 1977.
En 1966 publicó la novela Paradiso, donde confluye toda su trayectoria poética de carácter barroco, simbólico e iniciático. El protagonista, José Cemí, remite de inmediato al autor en su devenir externo e interno camino de su conversión en poeta. Lo cubano, con sus deformaciones verbales, desempeña un papel fundamental en la obra, como ocurre en su colección de ensayos La cantidad hechizada (1970).
Oppiano Licario es una novela inconclusa, aparecida póstumamente en 1977, que desarrolla la figura del personaje que ya aparecía en Paradiso y de la que toma título.
Lezama Lima ha influido inmensamente en numerosos escritores hispanoamericanos y españoles, algunos de los cuales llegaron a considerarle su maestro,
Murió en La Habana en el año de 1976.

domingo, 9 de mayo de 2010

Felicidades, Mamá




viernes, 7 de mayo de 2010

Elegía de la madre ausente


ELEGIA DE LA MADRE AUSENTE
Madre ¿Dónde estás? NO, no me lo digas
YA se...estás en el canto de las aves...
en el perfume delicado de las flores.
En las cumbres... y en los valles
en los campos, en los pueblos en las calles
en el sonido melodioso de las olas
en las nubes que plácidas se mecen
en la luz de las estrellas que parecen
ángeles coronándote de aureolas.

Estás en el llanto y en la risa
en la fuerza del viento
en el furor de la tormenta
y en el suave arrullo de la brisa.
Estás en el silencio...en el murmullo...
en la quieta corriente del arroyo
en el tumulto...en la quietud
y en las cuerdas armoniosas del laud.

Estás en el susurro y en la algarabía
en lo triste y en lo bello de las noches
y en lo hermoso de los días.
Estás en el llanto...en los placeres
en las alboradas y en los atardeceres.
Estás en las flores fallecidas
que dejan sus pétalos caer
y en las que tienen nueva vida
que sólo acaban de nacer
en las que viven en lo etereo...indefinidas
inmarcesibles madre...cual tu ser.

Estás en la lágrima que brota
y en la que vive en el pensamiento
en el pecho del hijo que te llora...
afligido por el sentimiento
que vive con el alma rota.
Estás en el patio de mi casa
estás en las flores que cultivo...
en el tiempo que pasa...pero que no pasa
porque por siempre vivirás conmigo.

Estás en la iglesia y en la cruz
en las plantas..en los montes
en el bello follaje de de las flores de Mayo
en mis noches de insomnio y de desvelo
cuando sueño que te fuiste al cielo
ascendiendo por un rayo de luz.

Madre...¿Dónde estás?...
No...ya no necesito que lo digas
acabo de encontrarte...
Estás aquí en mi pecho
¡¡Estás con Dios!!
y por estar con EL
Madre...
¡¡ESTAS EN TODAS PARTES.!!

Félix Pagés-Romeo

miércoles, 5 de mayo de 2010

El espíritu de la mujer cubana


Un poema dedicado a todas las mujeres cubanas, portadoras y herederas de esa estirpe de valientes que amaron y aman la libertad y el decoro por encima de todas las cosas.

La bordadora

Cuando se oyó el grito en Yara,
abandonando su hogar,
su esposo se fue a pelear
el odio escrito en la cara.

Ella, joven como era
llena de entusiasmo santo
bordó una rica bandera
en la que envuelto volviera
muerto, aquel que amara tanto.

El hijo heredó la fiera
ansia por la redención;
con fervorosa pasión
ella bordó otra bandera.

Bandera que fue sudario
de aquel expedicionario
que desplegándola al aire,
cayó muerto, voluntario,
en un manigual de Baire...

En el antes dulce hogar
la viuda infunde respeto,
¡Cómo cuida de su nieto
que ha de saberla vengar!

Crece el niño y ella espera
que atienda Dios su plegaria:
verle triunfar, o que muera
mientras borda otra bandera
con la estrella solitaria...
Enrique Hernández Miyarews
(1859-1914)


miércoles, 28 de abril de 2010

POEMA DE UN NIÑO TRISTE


Aquel niño triste... de montes y bateyes
aquel niño triste... que nunca tuvo reyes
que durante las noches contaba las estrellas
y después en sus sueños... soñaba con ellas.

Aquel niño triste vagando por caminos
polvorientos, queriendo agarrar los gallos finos
Ahh... como se acuerda de aquellos buenos ratos
aunque muchas veces andaba sin zapatos.

Cazando mariposas... ¡por los jardines!
y con su jaula sólo cazando tomeguines.
andando por veredas, sabánas y potreros
oyendo el melodioso cantar del sabanero.

Ohh... como recuerda las dulces mañanas
viendo despertar la campiña cubana
lo mismo en Enero que en Julio o en Mayo
sentir a lo lejos el cantar de los gallos.

Y después de la lluvia caminar por el fango
después del aguacero a recoger los mangos
Ohh... mangos deliciosos, maduros y dulzones
igual que los jugosos y ricos marañones.

Y que sabroso era con arte y con maña
en el viejo trapiche exprimir una caña
y ver como el gallo al cantar se empinaba
y a la gallina corriendo alcanzaba.

Aquel niño triste de rios y lagunas
que soñaba despierto como alcanzar la luna
que a veces se perdía entre los yerbazales
caminando por los surcos de los cañaverales.

Aquel niño triste que jugaba conmigo
porque yo era su único amigo.
jugaba callado, tranquilo... sin riña
cazando lagartijas por las cercas de piña.

Recogiendo las flores del campo silvestre
así era su vida... su vida campestre
Así era su vida... así se entretenía
porque de otras cosas, el nada sabía

Jugando con semillas de los cacahuetes
porque los reyes nunca le trajeron juguetes
Aquel niño triste de tan poco tamaño
que abandonó la escuela a la edad de once años.

No porque quisiera dejar de estudiar
sino porque tenía que ir a trabajar
trabajaba muy duro en invierno o verano
y el machete le hacía llagas en sus manos.

Y aunque mucho tiempo ya hoy ha pasado
su triste niñez...aún no ha olvidado
pues la lleva consigo por siempre grabada
como lleva el soldado asida la espada.

Pero el tiempo como todas las cosas pasó
y aquel niño triste con el tiempo creció
y ahora se encuentra a pesar de lo adverso
contento y felíz escribiendo estos versos.

y así con esta historia termina este cuento
de aquella... su niñez... una miñez opaca
quizá recordando sus viejos instrumentos
¡El arado, el machete... y la guataca.

Felix Pages - POEMA DE UN NIÑO TRISTE:

lunes, 26 de abril de 2010

¿Sabías que....?


La Canela y la miel son las únicas sustancias alimenticias en el planeta que no se echan a perder.


Aunque su contenido se puede convertir en azúcares, de todas formas la miel siempre es miel. Si la miel se deja por largos periodos de tiempo en un lugar oscuro se cristalizara. Cuando esto pase abra la tapa y con el calor de agua hervida, déjela derretirse. La miel estará tan buena como cuando nueva.
Nunca hierva la miel ni la ponga en el microondas, de esta manera se matan sus enzimas. La canela y la miel pueden curar muchas enfermedades. La ciencia acepta a la miel como un medio muy efectivo para tratar enfermedades. La miel puede ser utilizada sin dar efectos secundarios y tomada en las dosis correctas, aunque sea dulce, no afecta a los diabéticos.


Enfermedades del Corazón
Haga una pasta de miel y canela, aplique todas las mañanas en pan, en vez de mermelada y cómala regularmente como parte del desayuno.
Esto reducirá el colesterol en las arterias y prevendrá en el paciente ataques al corazón. Además, aquellos que ya hayan pasado por un ataque al corazón, si siguen este proceso, estarán protegidos de sufrir un siguiente ataque al corazón. El uso regular de estas sustancias ayuda a retener el aliento sano y a fortalecer el músculo y el movimiento rítmico del corazón
Artritis

Pacientes con artritis pueden tomar diariamente por las mañanas y las noches una taza de agua caliente con dos cucharadas de miel y una cucharada pequeña de canela en polvo. Si se toma regularmente la artritis crónica puede ser curada.


Recientes intestigaciones realizadas por la Universidad de Copenhague demostraron que aquellos doctores que trataron a sus pacientes con una mezcla de una cucharada de miel y media cucharadita de canela antes del desayuno, corroborraron que en una semana, de 200 pacientes, 73 ya no sentían dolores artríticos ya la mes, casi todos los pacientes que anteriormente no podían caminar o moverse por los dolores, se movían sin sentir dolores.


Digestión
La canela esparcida en dos cucharadas de miel tomadas antes de las comidas puede reducir la acidez y digerir hasta los alimentos más pesados.

Catarros y Resfriados

Un científico ha comprobado que la miel contiene un ingrediente natural que mata los gérmenes de la influenza y que protege a los pacientes del catarro.

Longevidad

El té hecho con miel y canela, tomado regularmente, disminuye los daños causados por la edad avanzada en los tejidos. Tome cuatro cucharadas de miel, una de canela en polvo y tres tazas de agua hirviendo para hacer un te. Tome un cuarto de taza, tres a cuatro veces al día. Le ayudará a mantener la piel fresca y a disminuir los daños causados por el envejecimiento de tejidos y radicales libres. Su vida puedrá alargarse hasta 100años.
Infeciones de la vejiga:

Tome dos cucharaditas de canela en polvo y una cucharada sopera de miel en un vaso de agua tibia y bébalo normalmente. Destruirá los gérmenes en la vejiga

Colesterol

Dos cucharadas miel y tres cucharaditas de canela en polvo mezcladas con 16 onzas de te administrados a un paciente con altos niveles de colesterol, redujeron sus niveles en la sangre un 10 por ciento en las primeras dos horas del tratamiento. Como hemos mencionado
anteriormente para pacientes artríticos, si tomado tres veces al día, cualquier enfermedad de colesterol crónica es curada. De acuerdo a la información la miel pura tomada como alimento a diario ayuda a reducir el colesterol.

Resfriados
Aquellos que sufren de severo resfrío pueden tomar una cucharada de miel tibia con 1/4 de cucharadita de canela por espacio de tres días.
Este proceso cura cualquier resfrío y aclara la sinusitis.
Estómago:
La miel
tomada con canela también ayuda a curar el estomago, aclara y hasta cura úlceras completamente.

Gas

Estudios realizados revelan que la miel y la canela reducen los gases en el sistema digestivo.

Sistema Inmunológico

El uso diario de miel y canela en polvo fortifica al sistema inmunológico y protege al cuerpo de bacterias y virus. Científicos han encontrado en la miel varias vitaminas e hierro en grandes cantidades. El uso constante de la miel fortifica las células blancas de la sangre y protege de enfermedades.

Espinillas

Tres cucharadas de miel y una de canela en polvo, haciendo una pasta, se pueden aplicar a espinillas antes de dormir, lavándose al siguiente día con agua tibia. Si se realiza por dos semanas, desaparecerán las espinillas desde la raíz.

Infecciones de la Piel
La aplicación de miel y canela en partes iguales en las partes afectadas curan el eczema y todo tipo de infecciones de la piel.

Pérdida de Peso

En las mañanas, medía hora antes del desayuno y antes de ir a dormir, beber una taza de agua previamente hervida con miel y canela. Si se bebe regularmente, reduce el peso de hasta la persona más obesa. También, el beber la mezcla regularmente no permite a las grasas
acumularse en el cuerpo aun si la persona lleva una dieta alta en calorías.

Cáncer
Recientes estudios en Japón y Australia han demostrado que canceres avanzados de estómago y huesos han sido totalmente curados.
Pacientes sufriendo de estos cánceres deberán tomar diariamente una cuchara de miel y una de canela por espacio de un mes tres veces al día.

Fatiga
Estudios han comprobado que el contenido de azúcar en la miel ayuda y no debilita la cantidad de fuerza en el cuerpo. Personas de la tercera edad que toman miel y canela en partes iguales, están más alertas y son más flexibles. El Dr. Milton, que ha hecho la investigación, dice
que un vaso con una cucharada de miel y espolvoreado de canela todos los días al levantarse y a las tres de la tarde, cuando la vitalidad del cuerpo empieza a disminuir, incrementa la vitalidad del cuerpo en el espacio de solo una semana.

Halitosis, (Mal Aliento)
Personas en Suramérica suelen hacer gárgaras con una cucharada de miel y canela en agua caliente, conservando el aliento fresco por todo el día.

Pérdida del Sentido del Oído

A diario, miel con canela en partes iguales ayuda a reparar tejido dañado de los oídos.


Si usted desea compartir esta información con amigos y compañeros, hágalo! Todos necesitamos ayuda y buena salud.

Dra. Jilian Acebal

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Nota: esta información me llegó a través de una cadena de e-mails. La publico porque puede resultar cierta. Desde muy pequeña he escuchado a muchas personas decir que la miel de abeja tiene extraordinarios poderes curativos. Algo de eso debe ser cierto

Cuanta más grasa, mejor se pasa



Dice el viejo refrán: "Mal de muchos, consuelo de tontos". No creo ser tonta pero lo cierto es que, en mi recorrido de hoy, me he encontrado un articulo que bien vale la pena compartirlo con ustedes




Cuanta más grasa, mejor se pasa
por Remedios Morales

Este verano, en el pueblo, nombraron miss a una tal Sigourney (La Sigurní), una moza alta como un armario, pletórica –con las plétoras bien colocadas– y tan tersa como si se le hubiera quedado el pellejo corto. La Sigurní, con su melena exuberante y su dentadura perfecta, rebosa salud y promete fertilidad. Así lo captaron todos los varones hechos a la antigua usanza heterosexual.

El cuerpo de La Sigurní me hizo reflexionar sobre la forma en que evolucionó este señuelo precioso que es el cuerpo femenino, por el que los hombres se dejan seducir y pierden gozosamente la libertad.

Los seres humanos, lo mismo que los animales, necesitamos señales genéricas biológicas para recabar información sobre nuestras posibles parejas y para utilizarlas como estructuras de cortejo. Según Jared Diamond, si buscamos en el cuerpo humano el equivalente a las señales genéricas o reclamos sexuales presentes en el dimorfismo del resto de los animales hallamos, al menos, tres grupos de señales que sirven para calibrar a nuestras posibles parejas o compañeros sexuales que se ajustan al modelo honesto, es decir, que responden verdaderamente a cualidades reproductivas. Estas son los músculos de los hombres, la "belleza" facial en ambos sexos y la grasa corporal de las mujeres.

Pero yo diría que nuestro cerebro trabaja en alianza con nuestro sex appeal y funciona como una estructura de cortejo de primer orden. Nos hace alardear y mentir sobre nuestras cualidades y, a veces, es difícil averiguar si las señales que captamos en un individuo del otro sexo son honestas. Y es que engañamos mucho a primera vista –me enteré, por la peluquera, que La Sigurní oculta bajo la melena un par de orejas de soplillo que piensa operarse cuando encuentre un sponsor– pero cuando largamos las primeras chorradas de cortejo engañamos mucho más. Dejando aparte el cerebro, que ya es mucho dejar, hay que considerar que somos mamíferos y que las cosas redondas, suaves, blandas y calientes nos gustan.

El cuerpo de las mujeres –otro día hablaré de los hombres– lleno de curvas cóncavas y convexas es un reclamo que está diciendo mírame, sígueme. Y hombres y mujeres dirigen sus miradas hacia las bailarinas, tenistas, actrices y patinadoras en detrimento de sus parejas masculinas porque tienen un cuerpo atractivo y excitante que se mueve con gracia.

El cuerpo de las mujeres responde a una triple adaptación que incluye en primer lugar, el reto de dar a luz un bebé muy cabezón con una pelvis adaptada para el bipedismo. La cintura estrecha, las caderas en forma de ánfora y los andares sinuosos atraen a los hombres porque son, en principio, señales genéricas honestas, de buena paridora, aunque a veces también la grasa miente y disimula una pelvis estrecha.

En segundo lugar, el cuerpo femenino responde a la necesidad de implicar al varón en la estrategia de gran inversión femenina. Así evolucionaron estructuras de cortejo específicas de las mujeres. Al sustituir las señales periódicas de celo por otras falsas, la naturaleza desestimó la vulva, que había quedado oculta por la postura erguida y formó un par de semiesferas de grasa sobre los glúteos, –derrières, como diría el experto en moda Carlos García-Calvo– más o menos vistosas según los diferentes grupos étnicos. En algunas poblaciones, las mujeres acumulan un rotundo suplemento de grasa en las nalgas (vaya por Dios) que se denomina esteatopigia. Pero no fue suficiente, ya que las relaciones sexuales se volvían personales y se practicaba el coito frontal, de manera que se replicaron las señales de celo por delante. Y así se desarrollaron otras dos semiesferas pectorales de las que hablare otro día.

La última presión evolutiva a la que se sometió el cuerpo de la hembra humana es el imperativo de hacer todo lo anterior con el menor gasto de energía posible. Las mujeres tienen un fenotipo ahorrador. Su tasa de metabolismo basal es sensiblemente inferior a la de los hombres y su cuerpo está diseñado para almacenar energía. Por eso, al sustituir los síntomas esporádicos de celo por otros fijos y falsos, la hembra humana utilizó la grasa como materia prima. Fabricar tejido adiposo es bastante más barato que fabricar músculos. Las mujeres tienen el doble de grasa que los hombres (25% de su cuerpo frente al 12,5%). Además, la grasa femenina constituye una señal genérica honesta porque al ser metabolizada produce gran cantidad de energía que resulta indispensable para criar, hasta tal punto que las mujeres excesivamente delgadas no menstrúan.

Los hombres, que están programados para responder a la llamada de la grasa, han decidido que les gustan las masas curvas y han ido esculpiéndolas a su aire durante la evolución. Así, la silueta femenina tiene un valor exclusivo de reclamo sexual. Ellos prefieren mujeres con una cantidad justa de grasa que, si les parece más sugerente, es porque responde biológicamente al prototipo de mujer que tendría éxito como paridora y criadora sin caer en el exceso que la pondría en riesgo de perder agilidad o de acabar diabética. Pero ¡qué difícil es mantener la línea! A diario soy testigo de la batalla que libran mis michelines contra el reductor intensivo. Y van ganando los michelines.

Pero, fijaos bien, hasta la celulitis puede quedar redimida por un pasado altruista. No podemos valorar en qué medida los músculos de nuestros machos fueron necesarios para recorrer el largo camino hacia la encefalización, pero la grasa de las mujeres, dado lo extendida que está y su persistencia frente a la dieta y la gimnasia tuvo que ser, por fuerza, de una importancia crucial.

Acomplejadas mártires de la báscula, compañeras de dieta y gimnasio: a vosotras dedico este elegante razonamiento que comienza con una pregunta: ¿pudo la celulitis salvar la humanidad? Pudo, sí. Nunca he oído que las feministas lo reivindicaran, pero ese potencial que poseen las mujeres para almacenar energía tuvo la virtud, en su día, de conseguir que el embarazo y la lactancia fueran posibles en condiciones extremas de escasez de alimentos y clima frío. Ese cuerpo acogedor que cubría las necesidades del hombre y de los hijos nos abrió un camino hacia el futuro. Lo que ocurre es que nuestro fenotipo ahorrador esconde en la recámara una Venus de Willendorf que se esfuerza en acumular grasa contra viento y marea y que sólo se manifiesta en todo su horroroso esplendor en épocas de abundancia

Tomado de:

Remedios Morales - Cuanta más grasa, mejor se pasa - Fin de semana: "VUESTRO SEXO, HIJOS MIOS

domingo, 25 de abril de 2010

Que linda es mi Cuba